El alimento del cuerpo me permite progresar, mantener mis funciones vitales, sobrevivir en el tiempo mientras mi vida no sea afectada por un suceso externo e incontrolable tal como un accidente o un desastre natural.
El alimento de los huertos, de las carnes y de las aguas me nutren, me hacen grande en lo físico principalmente, me afina la mente secundariamente, para esto último tenemos un mejor alimento.
El alimento es el derecho del ser humano, de su condiciòn de vida, de su herencia de hijos del Creador; por supuesto que el alimento tenemos que ganàrnoslo, pero eso a veces no pasa, sin embargo muchas veces, aùn los que no merecemos un alimento tenemos una mano estrechàndolo hacia nosotros, para probar un bocado o un banquete, para saciarnos o calmarnos.
El alimento que solemos descuidar o incluso anular por completo es el que necesita nuestro espíritu, esencia misma de nuestra existencia, el fondo natural de las manos de quien nos hizo a su imagen y semejanza; el alimento que proviene de su palabra, su legado permanente, el mejor que podremos tener los seres humanos, ese justamente es el que dejamos de lado.
Y lo que está escrito, el hombre a dominado al hombre para perjuicio suyo es una triste verdad, este es el reposo de los tiempos muertos, este es el descanso final de tanta lucha y menoscabo de la valìa de nuestra condiciòn humana.
Vagamos en el tiempo de nuestras vidas creyèndonos autosuficientes y sabios que no nos percatamos que andamos por valles disfrazados, por parajes tan solo alucinantes pero sin un fondo sustentable, son solo ilusiones, son solo espejismos.
Mira!!!
¿A donde nos han llevado los caminos del hombre para el hombre en sentido general, total, global o como quieras llamarlo?
Respuesta: A una permanente lucha entre los pueblos, casa adentro y casa afuera, es decir vivimos en conflictos desde nuestros propios hogares, pasando por conflictos en nuestros barrios, ciudades, paises, continentes y finalmente complicamos a todo el planeta con nuestros problemas, quejas y demàs comportamientos.
Alimento llega a mi no como perecedero sino como permanente
nutre mis cimientos profundos y ensèñame en donde resulto cabeza dura
Alimento llena mi plato y sirve a mi copa para sentarme quieto
calmado en la noche inoportuna del visitante y no alterarme por sus presentaciones
Llega alimento tu en el momento de siempre, en el momento que no acaba
permanece cuando siento hambre, prevalece cuando estoy saciado
Alimento redistribúyete para todos que todos te necesitan
alimenta por un momento hasta al terco a ver si retrocede sobre sus pasos
Alimento llega una noche y sírvete a las masas
que sientan tu sabor una vez más
a lo mejor los corazones se ablanden
a lo mejor las cabezas se suavicen
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