Día 17, un homenaje a la persistencia
Día 17, un hazte ver a la constancia
Marcando el paso pausado,
yendo a ver a los lados trastocados
Entendiendo las miradas como en un soplo
viajando, llegando, mirando
viendo este día con gran homenaje
vestido de gala, vestido de victoria
con valentía, con cosa mía.
Te amé como jamás soñé
te añoré como tal no pensé
te tuve, te perdí
te hablé, te pensé
te fuiste sola sin invitación
te fuiste parca, dejando esta abrasión
Kokoro, la magia
ligado a las sinfonías, a las líricas del viento, a los polvos del universo
elevando en magia grande mi vida en ese no se qué
por ti vivo, por ti sueño, por ti nuevamente empiezo
Nadie conoce el alma misma, peor el corazón con certeza
ciertamente el corazón es difícil de entender
pero aún en su incomprensión hay un algo que no se arranca
que persevera, que ahí se queda
aún ahí corazón mío no está en paz el alma mía
aún ahí corazón quieto no esta en calma mi alma muerta
Te repites arrasante con esta cosa que no se arranca
te repites hasta mareante con este algo que no se olvida
Oh corazón mío del alma mía!
Oh corazón bendito del soplo infinito!
Oh corazón, cálmame en tu paz que te es dada como en la sinfonía!
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